Beber café es una forma placentera de velar por la salud, pero su contenido en cafeína y sus propiedades estimulantes pueden ser contraproducentes en algunos casos.
Existenmuchos motivos que invitan a tomar café. Hay quienes disfrutan de esta bebida porque les encanta su inconfundible aroma y sabor, porque están al tanto de sus propiedades beneficiosas o porque necesitan ese impulso estimulante que le otorga la cafeína. Pero no es menos cierto que, precisamente este último aspecto, debe ser manejado con cuidado.
Y es que la cafeína, en altas cantidades, puede interferir con el descanso y elevar la ansiedad, aunque todo depende también de la tolerancia. Sin embargo, existen formas de consumir café sin que la dosis represente un problema para quienes no pueden o no quieren excederse.
Al menos eso es lo que asegura Andrew David Huberman, neurocientífico y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, que, como recoge el portal longevidad.hub, explica que hay una manera de consumir cafeína sin que interfiera en el organismo y que a su vez evite esa molesta sensación de cansancio que acontece en las primeras horas de la tarde.
El problema es que para muchos puede ir en contra de lo que están habituados. “Es un mecanismo genial. En realidad hay un truco para evitar el cansancio por la tarde. Bueno, no es un truco, es biología”, relata el prestigioso experto.
«Básicamente, cuanto más tiempo estás despierto se acumula adenosina en el torrente sanguíneo y es lo que te hace sentir fatigado. Por su parte, la cafeína es un antagonista de la adenosina y bloquea el receptor de adenosina. Pero cuando la cafeína desaparece, la adenosina todavía está presente, se une a ese receptor y te da el bajón. Te sientes muy somnoliento”, relata Huberman.
De este modo, lo que el experto recomienda es lo que todos hacemos: evitar consumir café conforme nos levantamos. “Una cosa que puedes hacer cuando te despiertes por la mañana es no ingerir cafeína durante los primeros 90 minutos más o menos. Intenta retrasar su consumo para que la adenosina y las interacciones del receptor de adenosina puedan tener lugar y disiparse”, explica.
“Luego ya puedes tomar cafeína y lo que sucederá es que si normalmente te daría un bajón alrededor de las 14 o 15 horas, ya no lo experimentarías porque la cafeína desaparece, pero no queda mucha adenosina para unirse al receptor”, concluye el neurocientífico.
Así pues, si sufres ese estado de somnolencia a primera hora de la tarde, eres muy sensible a la cafeína y no puedes disfrutar del placer de una buena siesta, la estrategia que comparte Huberman puede ser muy efectiva siempre y cuando seas capaz de ‘funcionar’ momentáneamente sin esa inyección de energía que supone un café bien cargado a primera hora de la mañana para activarte.
ÁLVARO PIQUERAS
Álvaro Piqueras es experto en deportes y en el último lustro se ha especializado en fitness, nutrición y otros temas de salud. Trata de mantenerse al día en lo que se refiere a nuevas investigaciones y tendencias de los campos que domina para poder compartir con rigor la rutina de entrenamiento que puede inspirar un cambio en tus hábitos, las propiedades de los alimentos que deberían formar parte de tu dieta o los hallazgos científicos que pueden mejorar el bienestar físico y mental de personas como tú.
Comenzó su trayectoria en medios locales y regionales de la tierra de Don Quijote, concretamente en Albacete. De ahí dio el salto a medios de ámbito nacional tras un enriquecedor paso por una maravillosa agencia de publicidad independiente con nombre de canción de los Beatles (GettingBetter), aunque siempre mantuvo intacta su vocación periodística.
De ahí que persiguiera su sueño de trabajar para alguno de los principales grupos editoriales del país como Prisa, Vocento y ahora también Hearst. Quizá le hayas leído en la versión digital del Diario As, abordando infinidad de temáticas, o en ABC y otras cabeceras y revistas del grupo elaborando reportajes de branded content para grandes marcas, multinacionales e instituciones. Y si no has tenido la ocasión, este es el momento de hacerlo en Men’s Health y Runner’s World.
Como no podía ser de otra forma, confiesa ser un amante de la práctica deportiva y desde muy pequeño ha probado con disciplinas tan dispares como atletismo, fútbol, baloncesto, tenis, ciclismo o natación. Unas veces sintiendo la adrenalina de la competición, y otras simplemente disfrutando de los beneficios de la actividad física. Ahora le ha dado por los ejercicios funcionales y el boxeo porque tiene la certeza de que el saco es incapaz de devolverle los golpes.
Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad de Alicante, también posee formación específica en gestión y dirección de RRSS, planificación estratégica y diseño gráfico. Últimamente se ha adentrado en el universo de la inteligencia artificial generativa aplicada al periodismo, pero jura y perjura que no la emplea profesionalmente porque, entre otras consideraciones, sigue disfrutando de cada palabra que escribe tras 20 años de experiencia en el sector de la comunicación.